Pagasa es tan pequeña que apenas puede aterrizar un avión, pero es objeto de una intensa disputa entre Filipinas y China, que mantiene a sus 300 habitantes bajo constante tensión.
Pagasa es tan pequeña que apenas puede aterrizar un avión, pero es objeto de una intensa disputa entre Filipinas y China, que mantiene a sus 300 habitantes bajo constante tensión.